Día 7. Würzburg y Nüremberg
Puente viejo (Alte Mainbrücke)
Fuente de los cuatro tubos (Vierröhrenbrunnen)
En el centro de Würzburg se encuentra el puente viejo sobre el río del Meno, está peatonalizado y decorado con 12 estatuas de santos. Esta estructura del siglo XV es el puente más antiguo sobre el río Meno y desde su centro te regala unas vistas maravillosas de la fortaleza Marienberg en dirección suroeste.
Tiene una longitud de 185 metros y no se permite el tráfico rodado, por lo que el ambiente es de lo más tranquilo. Detente a observar las numerosas esculturas de gran tamaño de santos y soberanos que adornan la estructura. Entre ellas se encuentran san José con el niño Jesús, Johannes Friedrich y la Virgen María.
El puente es un punto de encuentro habitual para lugareños y visitantes, sobre todo durante las cálidas noches de verano. No te pierdas las vistas hacia el este de los principales atractivos de la ciudad, ubicados en el casco histórico. Precisamente, si tomas esa dirección llegarás a la catedral de San Kilian, con sus dos torres gemelas. Te recomendamos acercarte por la noche para que disfrutes de los puntos de interés iluminados bajo un cielo estrellado.
El puente se construyó en 1476 y fue el único cruce peatonal del río Meno hasta finales del siglo XIX. Sin embargo, en la zona había un puente románico de piedra construido en el siglo XII. La estructura que puede recorrerse hoy fue gravemente dañada durante la Segunda Guerra Mundial, aunque fue reconstruida más tarde.
De estilo barroco, fue realizada en el ano 1765, por los artistas Auvera y Hohann Peter Wagner y se encuentra en medio de la plaza.
Con forma de obelisco, a lo largo de la fuente podemos observar, diversas esculturas y escudos. Es interesante de ver.
Representa el valor, la sabiduría, la justicia y la moderación.
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